La Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País se fundó en 1775. Fue Carlos III quien la impulsó, sin él y sus ideas ilustradas no hubiera sido viable. Ya sabemos que la Ilustración era un movimiento intelectual con gran auge en Francia e Inglaterra que consideraba que el ser humano debía de emplear la razón y el pensamiento crítico.
Con estos preceptos surgió la institución de la que hablamos, no sin muchas dificultades por las críticas provenientes de los sectores conservadores y tradicionales. Los objetivos de esta sociedad eran mejorar la agricultura, la industria y los oficios. La base para conseguir estos propósitos no era otra que la educación del pueblo, considerada como herramienta vital para alcanzar el progreso.
La sede de esta sociedad no podía ser más acertada: la Torre de los Lujanes, situada en la Plaza de la Villa, más bien en la calle del Codo. Desde allí se puede disfrutar de una de las visiones del Madrid medieval mejor conservadas que tenemos: el arco que da acceso a la torre.
El artículo, de Fátima de la Fuente del Moral, Doctora en Economía y Catedrática de Universidad no tiene desperdicio. Se refiere a los principios de esta institución, a la contribución de esta entidad a la educación, a sus presidentes y a los nuevos aires que corren por allí.